Conducir y hablar por el móvil: ¿cuáles son los riesgos?
Artículo revisado por el Comité
A veces conducimos realizando otro tipo de acciones que nos impiden prestar la atención necesaria a la conducción. Y entre estas distracciones se encuentra el uso del móvil.
A veces conducimos realizando otro tipo de acciones que nos impiden prestar la atención necesaria a la conducción. Y entre estas distracciones se encuentra el uso del móvil.
Es como si llevásemos un piloto automático que nos permitiera pensar en otras cosas. A esto lo llamamos conducción subsconsciente, una forma de conducir que aparece la mayoría de las veces con la rutina, ya sea por realizar un mismo recorrido una y otra vez o por transitar una ruta aburrida y monótona. ¿Cuáles son los riesgos del automatismo y la distracción?
Cuando corremos más riesgos es cuando combinamos una acción en la que tenemos que poner los cinco sentidos como es la conducción y una acción que nos llama la atención como es una llamada de móvil o un mensaje de Whatsapp. En este momento es cuando ingresamos en la zona de riesgo ya que seguimos conduciendo (acción automática) mientras escribimos un mensaje (acción controlada). Perder de vista la carretera durante medio segundo puede causarnos un accidente mortal o, como mínimo, un buen susto. Nos ponemos en peligro nosotros mismos pero también a todos los conductores con los que estamos compartiendo la carretera.
A finales del año pasado se contabilizó que un 41% de las muertes en las carreteras españolas fueron causadas por distracciones como el uso del móvil. De hecho, ésta se posiciona como la causa más frecuente de accidente mortal durante el 2014.
Por eso, para mejorar tu nivel de conducción y evitar posibles accidentes tienes que estar atento y administrar con criterio tus acciones. Conducir y hablar por el móvil es posible pero incrementa los riesgos al volante. ¡Sé un conductor inteligente!