Navidad = más cajas de cartón
Artículo revisado por el Comité
La producción de cajas de cartón durante las Navidades alcanza cifras sorprendentes. Veamos por qué.
Como no podía ser de otro modo, durante las Navidades, la producción y, por ende, comercialización de cajas de cartón se incrementa de manera importante.
Ya lo comentamos hace unas semanas: las empresas especializadas en la fabricación y venta de cajas de cartón se encuentran sumidos, desde hace años, es una actividad imparable como consecuencia de la subida en la demanda de cajas de cartón. Si en ese momento afirmábamos que las mudanzas, y el posterior uso que se hacía de las cajas, eran las responsables de dicha subida, aquí, en este artículo, queremos valorar la incidencia de estas fiestas en el aumento de la producción y venta de estos embalajes.
Y es que, con las Navidades a la vuelta de la esquina, la fabricación y comercialización de cajas de cartón alcanza cifras sorprendentes. Los juguetes necesitan cajas para proteger su contenido. Muñecas, coches, trenes, juegos de mesa… Todos estos regalos, propios de estas fechas, usan cajas de cartón. Pero hay más: también se buscan cajas para envolver esos regalos especiales que hemos comprado o aquellos que repartimos entre los trabajadores de nuestra empresa. Tanto empresas como particulares demandan cajas de diversos tamaños y formas para guardar en él sus regalos (cestas de navidad, cajas para vinos, quesos, jamones y demás embutidos, cajas de bombones y mantecados, cajas para libros, piezas de joyería…). Y eso, obviamente, hace subir la fabricación de cajas de cartón de manera significativa.
No nos podemos olvidar tampoco de resaltar que el aumento en la demanda de cajas de cartón no solo tiene que ver con los regalos propios de esas fechas. También se debe a que son muchas las personas que eligen las Navidades para mudarse. La posibilidad de disponer de días de vacaciones anima a muchos a organizarla y realizarla durante estas semanas. En verano, otra época de vacaciones, el cansancio de todo el año, la búsqueda de un destino en el que perderse para recargar las pilas y las altas temperaturas suelen frenar las mudanzas. Pero durante las Navidades la cosa es diferente, por lo que se suele aprovechar ese pequeño parón en la agenda para cambiar de domicilio. Y, como no, eso dispara también el uso de cajas, lo que repercute en su producción y venta.
¿Cómo son las cajas que buscamos?
Si lo que queremos es mudarnos, recurriremos a las cajas de siempre: grandes, amplias y resistentes para que puedan aguantar el peso de nuestros enseres sin que estos se rompan o se deterioren. En cambio, el aumento de las cajas viene determinado por aquellas que se demandan para los objetos características de estas fiestas: los dulces navideños y, sobre todo, los regalos. Son cajas personalizadas, adaptadas al tipo de objeto que vayan a contener, no solo en tamaño sino también en forma y color. Cajas rojas, verdes, azules…, decoradas con motivos geométricos o vegetales, cajas alargadas, triangulares, circulares, con forma de corazón o de árbol de Navidad…La variedad es inmensa. Y eso lo saben las empresas que se dedican a la fabricación y comercialización de estos embalajes tan universales.